¿Qué son monitores autoamplificados?

Básicamente entendemos por altavoces autoamplificados, o monitores autoamplificados, una pareja de altavoces en formato estéreo que integran su propio amplificador con el fin de no necesitar de un amplificador externo para conseguir reproducir el sonido.

Los altavoces autoamplificados también se conocen como altavoces activos, mientras que los altavoces que precisan de un amplificador externo se denominan altavoces pasivos.

Los altavoces pasivos son los más comunes y están presentes en todo tipo de aplicaciones tanto profesionales como domésticas aunque los monitores activos van sumando adeptos gracias a la calidades de audio que aportan las últimas tecnologías y la comodidad que ofrece el prescindir de otros aparatos de audio externos.

Índice

• Ventajas de los altavoces autoamplificados
• 6 usos recomendados para altavoces autoamplificados
• ¿Porqué usar altavoces autoamplificados?
• ¿Cuáles son las mejores marcas de altavoces autoamplificados?
• ¿Qué es imprescindible en un sistema de altavoces autoamplificado?
• ¿Qué es un sistema de altavoces biamplificado?

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Ventajas de los altavoces autoamplificados

Los altavoces autoamplificados de hoy en día, para un uso doméstico, reúnen una serie de características muy interesantes que han hecho que sean cada vez más demandados y que muchos fabricantes los tengan en sus catálogos. No es un concepto nuevo ya que existen desde hace tiempo pero en los últimos años han evolucionado mucho llegando a tener calidades de sonido muy buenas.

Sistema independiente y sencillo

Una de las principales ventajas de los altavoces activos – autoamplificados es la independencia de aparatos complementarios como amplificadores y la simplicidad de instalación ya que su configuración suele ser muy rápida e intuitiva. Al tener su propia amplificación no es necesario contar con un amplificador externo, es decir, podemos prescindir de un aparato que suele ocupar bastante espacio.

Versatilidad de conexiones

Los altavoces autoamplificados de hoy en día cuentan con la ventaja de ser muy versátiles a la hora de poder conectarlos a diferentes fuentes de sonido. Normalmente, uno de los altavoces incorpora una placa con diversos tipos de conectores por cable como RCA, Phono, Jack 3.5mm, Toslink, USB o incluso ethernet. Todas esas conexiones pueden ser utilizadas para suministrarle señal de audio desde diferentes aparatos como televisiones, lectores de CD, videoconsolas, tocadiscos y otras muchas fuentes.

Conexión inalámbrica

La mayoría de los altavoces autoamplificados modernos incluyen algún tipo o varios tipos de conexión inalámbrica. La más común es la conexión Bluetooth que nos permite mandarle audio desde un smartphone u ordenador. También los hay que incluyen conexión por Wi-Fi para aplicaciones multiroom y otros incorporan AirPlay 2 para el ecosistema de Apple.

Movilidad

Al no precisar de aparatos externos para su amplificación, contamos con la ventaja de recolocarlos más rápidamente y de forma más sencilla. Podemos cambiarlos de estancia o llevarlos a una zona de escucha puntual sin la complejidad de tener que trasladar un amplificador con todo su cableado. Por lo tanto, un sistema de altavoces activos nos permite una mayor movilidad.

5 usos recomendados para altavoces autoamplificados

Escuchar música en el dormitorio: No siempre tiene sentido instalar un sistema estéreo completo en su dormitorio, especialmente si hay limitaciones de espacio. Los altavoces autoamplificados con Bluetooth te permiten colocar dos altavoces compactos en un escritorio o estantería, enchufarlos y empezar a disfrutar de la música desde un teléfono o portátil. Es la solución de altavoz más fácil y menos molesta para un espacio reducido.

Audio en televisión: La capacidad de los altavoces autoamplificados modernos, así como las tecnologías con las que se transmite el audio en TV, hacen de los altavoces monitor autoamplificados sean una de las mejores opciones para mejorar y lograr un audio de calidad e inmersivo en películas, series y retransmisiones de deporte. En ocasiones mejor, incluso, que muchas barras de sonido al contar con sistemas de amplificación avanzados, grandes drivers y tweeters de precisión. Podemos incluso encontrar modelos con la capacidad de conectar una subwoofer externo para crear un sistema 2.1.

Música de campo cercano en escritorio: Tanto si se trabaja en casa, en una oficina o se tenga un estudio de música dedicado los altavoces autoamplificados son perfectos para escucha de campo cercano, es decir, de cerca. Si estás sentado entre los dos altavoces, puedes disfrutar de una experiencia de monitorización íntima que es ideal para los oyentes ocasionales y lo suficientemente precisa para los productores musicales, podcasters, youtubers o streamers.

Vida en apartamentos: Los altavoces autoamplificados compactos son ideales si queremos ahorrar espacio, por ello para espacios pequeños es una de las mejores opciones. Si además tenemos en cuneta la posibilidad de múltiples conexiones nos ofrece una solución muy versátil. Podemos usarlos como un sistema conectado a múltiples dispositivos aprovechando todas opciones de conexión que nos ofrecen.

Reuniones, barbacoas y fiestas: Los eventos al aire libre necesitan una banda sonora divertida para animar el ambiente, pero no todo el mundo tiene el tiempo o el dinero para configurar un sistema de audio completo. Con un par de altavoces autoamplificados, lo único que necesitas es una fuente de alimentación y un smartphone para empezar la fiesta. También hay altavoces para fiestas que disponen de este formato.

Tocadiscos: Uno de los usos más extendidos y que ahora está de moda es la utilización de altavoces autoamplificados con tocadiscos. Ya sean platos antiguos o más modernos podremos utilizar un sistema de altavoces autoamplificados y ahorrarnos un amplificador externo. Para ello tenemos modelos que cuentan incluso con entradas phono y otros con RCA que son las salidas típicas de los tocadiscos.

¿Porqué usar altavoces autoamplificados?

Plug & Play: Prácticamente se trata de sistemas listo para ser utilizados desde el principio sin necesidad de instalaciones complicadas.

Todo en Uno: Con un sistema estéreo autoamplificado actual tenemos una gran cantidad de posibilidades de utilización, y todo sin necesidad de amplificadores, etapas o receptores A/V. Podremos tenerlo conectado simultáneamente a un varios dispositivos y elegir en cada momento cual escuchar.

Actualizaciones: Los mejores modelos de altavoces autoamplificados suelen tener la capacidad de recibir actualizaciones del fabricante que incluyen nuevas funcionalidades, nuevos codecs o nuevas versiones de software que mejoran el rendimiento del aparato.

Control por APPs: Los fabricantes suelen tener disponibles APPs que permiten cambiar diferentes aspectos del sistema autoamplificado, desde el perfil de audio a aplicaciones de sonido inmersivo. También, algunos de ellos, tienen la posibilidad de trabajar en multiroom o incluso unirse a otros altavoces de la misma familia para crear zonas de ambiente.

Minimalista: Es una opción que ahorra más en espacio al no necesitar de aparatos complementarios y también se ajustan mejor a cualquier ambiente de diseño.

¿Cuáles son las mejores marcas de altavoces autoamplificados?

Actualmente tenemos en el mercado una gran variedad de altavoces autoamplificados para uso doméstico. Las firmas míticas que desde hace mucho trabajaban sólo con altavoces pasivos se han ido uniendo a este mercado de los autoamplificados ofreciendo su gran experiencia en audio. Hoy tenemos marcas míticas como Keff, Klipsch, QAcoustic, Polk o JBL pero también hay otras firmas emergentes o más recientes que pisan con fuerza como Edifier.

¿Qué es imprescindible en un sistema de altavoces autoamplificado?

Además de un buen sonido y de una potencia que se ajuste a nuestras necesidades, hoy en día es casi imprescindible que un sistema de altavoces estéreo autoamplificado tenga integrado:

Conexiones digitales: Para poder recibir por cable la señal de audio en máxima calidad casi es indispensable que cuente con alguna entrada USB, toslink o HDMI.

Conexiones inalámbricas: El Bluetooth es, probablemente, el sistema de conexión que más se emplea en este tipo de altavoces. La ventaja de poder mandar música desde un smartphone es obligatoria para muchos usuarios. Pero también está el WiFi y el AirPlay de Apple, aunque como obligatorio debería ser el Bluetooth en alguna de sus últimas versiones.

APP de control: Si un sistema de altavoces autoamplificado tiene una APP para poder controlar diferentes aspectos del sonido, acabaremos sacándole mucho partido. Poder cambiar el perfil, por ejemplo, de música en vivo a sonido inmersivo para una película nos da una gran versatilidad y un mayor disfrute del equipo.

Salida para subwoofer: Si bien es cierto que en muchos modelos no es necesario por tener integrado otros sistemas para aumentar los graves, la sensación de un subwoofer puede subir el nivel del audio que percibimos en, por ejemplo, películas, juegos o conciertos. Los subwoofers que se utilizan en estos sistemas también son autoamplificados.

¿Qué es un sistema de altavoces biamplificado?

Un altavoz biamplificado, hablando de altavoces activos, es aquel que utiliza dos amplificadores separados para potenciar diferentes partes del altavoz. Normalmente, en un sistema biamplificado tenemos:

1. Un amplificador que potencia el woofer, que es el altavoz diseñado para producir las frecuencias bajas o graves.
2. El otro amplificador potencia el tweeter, que es el altavoz diseñado para producir las frecuencias altas o agudos.

La idea detrás de la biamplificación es que al separar las frecuencias y potenciarlas con amplificadores independientes, se puede obtener una mayor precisión y control sobre el sonido, lo que puede resultar en una mejor calidad de audio. La biamplificación puede ayudar a reducir la distorsión, mejorar la respuesta en frecuencia y proporcionar una mejor dinámica en la reproducción sonora.

Existen también sistemas tri-amplificados (o incluso más), donde se utilizan tres (o más) amplificadores separados para potenciar distintos drivers o altavoces, como woofers, medios y tweeters.

Para utilizar correctamente un sistema biamplificado, es esencial tener un crossover (divisor de frecuencias) que se encargue de separar las señales de audio en las frecuencias adecuadas para enviarlas a los amplificadores correspondientes integrados dentro del sistema.

La biamplificación es una técnica que busca mejorar la calidad del sonido mediante el uso de amplificadores dedicados para diferentes rangos de frecuencia dentro de un altavoz. Es popular tanto en aplicaciones profesionales como en sistemas de audio de alta fidelidad para el hogar.

Cada altavoz puede estar amplificado

También es posible encontrar cada vez más otro sistema de biamplificación que consiste en que dada uno de los altavoces en un sistema autoamplificado lleva integrado un amplificador específico. Estos sistemas bien se comunican entre un cable que suministra potencia de uno a otro altavoz y coordina de forma precisa el sonido o bien se enlazan por Bluetooth. Este es el caso del concepto del altavoz para fiestas que permite enlazarse uno con otro para generar un sistema estéreo.